Desplegar el movimiento – Darío Parejas (Pinturas)

La obra toma el pasacalle como soporte para explorar el movimiento a través de la línea
y el color. Al situarse en un espacio efímero y público, el pasacalle rompe con la idea de
la obra de arte fija, entrando en diálogo sobre la fugacidad del arte en la modernidad.
Las líneas, lejos de ser simples trazos, representan vectores de movimiento que evocan la temporalidad y la transitoriedad del momento.

El color, actúa como un “evento”, irrumpiendo en el espacio visual con una singularidad
que desestabiliza la composición lineal, proponiendo una nueva verdad estética. Este
uso del color, en constante transformación según la luz y el ángulo de visión, subraya la
naturaleza dinámica del soporte. La abstracción en la obra permite al espectador una lectura abierta, liberada de la representación figurativa.

El pasacalle, enfatiza la idea de un arte en tránsito: siempre en movimiento, siempre cambiando.
Este tránsito no solo es físico, sino también conceptual, ya que la obra problematiza la relación entre tiempo,
espacio y percepción.